17 de Julio
Madrugón!!! Nos levantamos a las 4:45, recogemos los bártulos y bajamos a por un taxi. Por suerte no tarda nada y llegamos a la estación de autobuses en 15 minutos. Nuestro autobús de Megabus está ya allí pero no hay nadie…se habrán dormido?? Nos van a dejar tirados justo hoy que no podemos perder ni un minuto?? Al final, con algo de retraso logramos ponernos en marcha, esperamos que no sea demasiado tarde…
Llegamos a Nueva York a las 10:30, un poco más tarde de lo previsto pero con algo de margen de tiempo aún, así que optamos por ir al aeropuerto por la vía más lenta pero más barata. Cogemos el metro y atravesamos Manhattan y Brooklyn, hasta Jamaica Station y de ahí un tren que nos lleva hasta al aeropuerto (1:45 más tarde llegamos!!!). Facturamos sin problemas y subimos!!! Al final todo hay ido según lo planeado y hemos superado esta prueba contrarreloj (no es necesario que comentemos como estaba Rocío con el stress jejeje)
Son las 17:00 y nos vamos directos a buscar a nuestros nuevos compañeros de viaje, que llegan dentro de una hora, en la terminal 1. Así que cogemos las mochilas y vamos andando a su encuentro,…estamos nerviosos e impacientes por verles, aunque hace poco que nos despedimos en Madrid, pero tenemos muchas ganas de verlos.
Les vemos aparecer, y traen un acompañante sorpresa!!! ha venido Su!!!!! no sabíamos nada, así que más ilusión. Merodeando por nuestro lado estaba también esperando nuestro anfitrión durante nuestra estancia en Los Ángeles, Luis, un amigo de Iñaki, pero como no sabíamos cómo era no pudimos conocerle antes. Desde el primer momento ha sido maravilloso, se ha portado con nosotros muy muy bien, ha sido un placer estar en su casa, que nos la ha hecho sentir como nuestra y que nosotros cinco la hemos “ocupado”.
Al día siguiente nos levantamos temprano y fuimos a ver….el cartel de Hollywood, acaso se podía empezar por otro lado?!? Primero fuimos al observatorio “Griffith”
y pudimos ver la inmensa extensión que ocupa Los Ángeles, aquí apenas hay edificios altos, todo es a lo largo, hay casas y casas hasta donde nos llega la vista.
De ahí fuimos a una zona residencial donde viven los famosos, todos debajo del cartelito famoso, y lo vimos mucho más de cerca.
Aprovechamos para dar una vuelta por el paseo de la fama, Beverly Hills, Melrose, Bel-Air, Santa Mónica.
Como no podía ser de otra forma, al día siguiente fuimos hacia Malibú, teníamos que ir a la playa como fuera, no podíamos irnos de Los Ángeles sin ir a Malibú Beach. El resultado, también el de esperar, todos quemados jeje, aunque no hicimos más que darnos crema allí todo el mundo salió con algo quemado….
El agua estaba congelada, pero nos lo pasamos en grande una vez que vino la primera ola y nos empapó. El agua estaba muy bien, porque había muchas olas. Ahora entendemos que aquí haya tanta gente con pasión por el surf. De ahí fuimos a degustar una fabulosa comida en el “Paradise Cove beach café Malibú”, una fabulosa comida en un sitio privilegiado, y sin que arruinara el bolsillo.
Paseo por el downtown, para ver el origen de esta ciudad y cómo nació de un pequeño pueblo de Españoles y su real nombre “El Pueblo de Nuestra Señora la Reina de los Ángeles”
Y por hoy está bien, que mañana tenemos un viaje por delante a Las Vegas…y tenemos que descansa.